martes, 18 de junio de 2024

Doña Fermina. (Por Patricia F.)

 


Este jueves la propuesta de relatos la trae MOLÍ DEL CANYER, el tema elegido es: MUJERES, rostros de mujeres, de todas las imágenes esta es la que me atrajo.

Espero les guste mi historia, inspirada en esas ancianas de los pueblos del interior de mi país, donde sobra la pobreza y la vida dura.






Doña Fermina. (Por Patricia F.)

Allá anda doña Fermina, con sus años a cuestas, lentamente por el sendero que va desde su rancho al cerro donde pastan sus ovejas. Los perros la acompañan, es la hora del regreso al corral donde pasarán la noche, al resguardo de algún puma hambriento. 

Mientras el sol se pone en el horizonte y en su fogón se calienta el agua para unos mates amargos, doña Fermina, con sus huesudas y arrugadas manos va hilando la lana que el fin de semana venderá a los turistas al costado de la ruta y quizá algún quesillo casero, que ella misma prepara con la leche que dan sus ovejas. 

La pava, renegrida de tizne apoyada en las brasas, comienza a chillar, señal de que el agua está lista, mientras llena su mate de calabaza con una mezcla de yerba y yuyitos serranos que ella misma prepara, canta una vieja copla, que su madre hace años le enseñara. Corta un trocito de queso que, junto a una tortilla al rescoldo, serán su cena. 

Doña Fermina lleva el tiempo cansado, de la vida, de los años, ya ni sabe cuántos... 

Si las arrugas se contaran, quizá lo dirían, ellas, fieles testigos de su larga vida entre las sierras. Hubo un tiempo que tuvo un compañero, hace tantos años, que ya casi no recuerda, pero un día la parca se lo llevó dejándola sola en su rancho con sus animales y sus penas. Hijos nunca tuvo, no fue bendecida con ellos, así que un día la llorarán las estrellas, sus ovejas y sus perros. 

Los cerros extrañaran sus pasos y quizá un cóndor deje caer una flor de espinillo en su tumba.

A pesar de todo sonríe, mostrando su boca desdentada, cargando en su espalda encorvada por el peso del tiempo, un fardo de leña y cantado otra vieja copla. 

La soledad avisa - por Rosana

  Cuántas soledades nos atraviesan a lo largo de la vida, pero había que elegir una y creo que esta, es la más dolorosa de las soledades. No...